¿Recordáis el concierto de Lady Dottie & The Diamonds de hace unos meses? ¿Recordáis a Nathan Beale, su guitarrista? ¿Recordáis que aquí hablamos muy bien de él? Pues ahora ha vuelto a visitarnos, pero con su propia banda Dirty Sweet, con la que ha venido a presentar su reciente American spiritual, publicado hace unos días y que sigue la estela de su aclamado ...Of monarchs and beggars. Influencias del Hard Rock de los 70 junto a música de raíces americana forman la base de estos trabajos, ciertamente recomendables.
Una buena entrada (aunque no lo parecía minutos antes de empezar el concierto) y ganas de disfrutar de canciones como Rest sniper, rest, con la que dieron inicio a la noche, de Born to bleed, junto a la coreada Man's ruin, la emocionante Delilah, la reclamada desde el principio Red river, y ya en los bises la potente Sixteen o la preciosa Isabel.
En escena se lucen especialmente el cantante Ryan Koontz y, sobre todo, ese torbellino llamado Nathan Beale que, libre de ataduras al tocar en su propio grupo, aquí se suelta y acapara la mayoría de miradas. Eso sí, como fuera del escenario mantenga ese ritmo de ingestión de alcohol quizá la vida le pase factura. En el lado contrario se encuentra el bajista Christian Schinelli, que siguiendo la tradición de John Entwistle o Bill Wyman no se mueve ni un centímetro en toda la noche, y además.......¡¡lleva bigote!! Haced memoria y veréis como os salen unos cuantos nombres de históricos bajistas bigotudos, ¿a que sí?
No perdáis la pista de esta banda. Valen mucho la pena.
Mr. Wolf
Más info en la web del grupo