ANTONY AND THE JOHNSONS. PALAU DE LA MÚSICA. 15/04/09

Hay artistas únicos y absolutamente personales y artistas que transitan por el camino marcado por otros con mayor o menor fortuna; Antony Hegarty pertenece al primer grupo y eso le hace situarse en un lugar propio en el universo musical, hoy en día nadie hace música como él ni la presenta en vivo de una forma tan desgarradora y personal. El concierto del Palau supuso un reencuentro con los fieles seguidores de este hombre y un feliz encuentro con muchos de los que no lo habíamos visto nunca en directo y desde ya somos adeptos a su particular cruzada íntima y a su forma de desnudar su alma en público.
Acompañado de una estupenda banda de seis músicos y de una insulsa bailarina, Antony nos descargó parte de los mejores temas de sus dos primeros discos y presentó los temas de ese álbum arriesgado que es The crying light, donde su propuesta íntima, sobria y elegante se torna en un difícil ejercicio de minimalismo musical que si bien es duro de digerir en disco, gana enteros en su presentación en vivo. Así se escucharon temas como Whereis my power, Her eyes are underneath the ground, Epilepsy is dancing, One dove, el desgarrador For today i am a boy, Kiss my name, Everglade, Another world, las más enérgicas Shake that devil y Fistful of love, The crying light, I fell in love with a dead boy, las bellísimas You are my sister y Aeon, Twilight, y ya en los bises Cripple and the starfish y la archiconocida Hope there's someone.
La sobria y elegante puesta en escena y la belleza y excelente acústica del Palau de la música convirtieron la velada en algo inolvidable.

Mr. Sheep

Extraño concierto el del ambiguo Antony en el incomparable marco del Palau de la música, entre el público una mezcla de indies embobados, rockeros despistados, los típicos personajes atentos a la moda de lo más fashion, porque por mucho que nos moleste a algunos hoy en día queda bien decir que te gusta la música de Antony, y también adeptos a los discos de este gran artista. El concierto resultó fantástico, brillante musicalmente y emocionalmente intenso, quizás un poco parco en minutaje, ya que si no contamos con los insufribles y vomitivos quince primeros minutos de tostón con la ¿bailarina?, apenas llegó a la hora y media; aunque eso sí, cuando nuestra indignación por el interminable preludio de la ¿bailarina? llegaba a un punto límite, comenzó un mágico ritual con una música y sobretodo una voz que no son de este mundo. El concierto tuvo grandes momentos, pero para mi recuerdo eterno siempre quedará Twilight.

Mr. Wolf

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SOUTHERN CULTURE ON THE SKIDS. APOLO 2. 04/04/09

Que banda tan encantadora y que ganas teníamos de verlos en nuestros escenarios. Han pasado muchos años desde su anterior visita a Bikini en un extraño concierto celebrado de madrugada, ya que aquel día tuvieron problemas con el transporte debido al mal tiempo. Esta vez nada falló y una sala con muy buena entrada recibió como se merece a este trío convertido ahora en cuarteto con la inclusión de un segundo guitarrista. Diversión, simpatía, carisma... nada de esto les falta en directo a Rick Miller, Dave Hartman y la bella Mary Huff, ésta retocándose continuamente el maquillaje y la peluca en una curiosa imagen. Y que canciones: Liquored up and lacquered down, The wet spot, Doublewide, Voodoo Cadillac, Whole lotta things (dedicada a Bo Diddley), Soul city, una espléndida Banana puddin', el Life's a gas de T. Rex que incluyen en su último trabajo de versiones Countrypolitan favorites y el verdadero momento álgido de la noche, el que todos esperábamos: el reparto de pollo con 8 piece box. Momento sin duda divertido cuando Rick subió a cuatro chicas del público (Rachel Arieff entre ellas) que se dedicaron a lanzar el famoso "chicken" a la audiencia mientras bailaban, con algún trozo que volaba devuelto de nuevo para ellas.

Como decimos, noche muy divertida con excelente música y minutaje generoso. Y es que si antes me gustaba mucho esta banda, después de verlos en vivo ahora puedo decir que me han dejado totalmente enamorado.

Mr. Wolf

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NASHVILLE PUSSY + SUPERSUCKERS. RAZZMATAZZ 3. 02/04/09

Lo que debería haber sido una gran noche rockera (que afortunadamente lo fue) empezó siendo un auténtico calvario para los asistentes debido al desastre organizativo. En primer lugar la sala no era la adecuada. Razzmatazz 3 está bien para conciertos de escaso público, pero para ocasiones como esta se convierte en una auténtica sauna con nefasta visibilidad (el escenario bajo, las columnas...). A ello hay que añadir la falta de puntualidad a la hora de abrir (más de media hora siendo una noche fría y lluviosa), la falta de información en el tema de las entradas (gente que no sabía si comprar la suya en la taquilla o en la puerta, gente en una cola que no le correspondía...), y lo que ya fue el colmo, que después de abrir tarde los Pussy salieran pronto a escena cuando muchos estaban aún en la calle. Increíble. Que falta de respeto por la gente. No sé si la culpa es de los organizadores, de los responsables de la sala o de ambos, pero realmente hacía tiempo que no veía tanta ineptitud. Que se lo hagan mirar.

Pasemos a la música. Nashville Pussy son ya unos habituales de nuestros escenarios y esta vez nos ofrecieron un furioso set de una hora escasa que nos dejó con ganas de más. Blaine Cartwright apareció ataviado con una camiseta de Judas Priest y tan malcarado como siempre (aunque según tengo entendido en realidad es una persona muy afable) y Ruyter Suys no nos falló y fue un vendaval sobre el escenario, como en ella es habitual. Sonaron muy bien los temas de su nuevo trabajo From hell to Texas como Speed machine o I'm so high, así como los demás, caso de The bitch just kicked me out, la versión de Nutbush city limits o Go motherfucker go, que no falta nunca. Fue una potente y sudorosa hora.

Y después "The greatest Rock'N'Roll band in the world": Supersuckers, otros habituales que también acaban de editar disco, su nuevo Get it together. ¿Qué nos ofrecieron? Os lo podéis imaginar, canciones irresistibles como Rock'N'Roll records (ain't selling this year), Bad bad bad, o esas que en directo nunca fallan: Pretty fucked up o Born with a tail. Afortunadamente no dejaron de lado tampoco su faceta más country y nos regalaron un bonito set con temas más relajados, entre otros Dead in the water y esa verdadera joya de su discografía llamada Roadworn and weary. En las últimas canciones Eddie Spaguetti y los suyos pudieron ver unas primeras filas realmente enloquecidas y empapadas en sudor que acabaron la noche felizmente pese a haberla iniciado con mal pie.

Para finalizar podemos decir que está muy bien tener conciertos así con dos espléndidas bandas, pero esperemos que la próxima vez los que se encarguen del evento no sean una panda de inútiles como ha ocurrido en esta ocasión.

Mr. Wolf

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THE ANSWER + AC/DC. PALAU SANT JORDI. 31/03/09

Si hay un concierto al que se puede ir sabiendo que se saldrá satisfecho del espectáculo presenciado, ese es sin duda uno de AC/DC, junto con los Stones la banda en activo que se puede considerar más clásica y a la que se puede adjetivar también sin duda alguna ya como mítica. De hecho, en cualquier otro concierto de otro grupo lo más fácil para animar y ganarse al público es tocar una canción de los hermanos Young. No falla nunca.
Tras ocho años de ausencia de nuestros escenarios los australianos (en realidad escoceses) volvían al Palau Sant Jordi, como sabéis con las entradas agotadas a las pocas horas de ponerse a la venta, en otro extraño suceso de nuestros días. ¿De dónde sale de repente tanto fan? Me alegro de su éxito, pero no deja de sorprenderme esta locura por asistir a determinados eventos rockeros por parte de mucha gente que, sinceramente, dudo que la música sea una de las prioridades en su vida.
Una de las bandas más grandes merece tener unos teloneros de lujo, y esos son los irlandeses The Answer, uno de los grupos más prometedores aparecidos últimamente y que venían con su nuevo trabajo Everyday demons bajo el brazo. Desde el inicio con Come follow me hasta su despedida con Under the sky nos hicieron pasar un buen rato con su música influenciada por los clásicos de los 70, aunque lógicamente lucen más en un escenario pequeño como el de Apolo 2, donde los vimos hace un par de años. De todas maneras esta gira les puede venir muy bien para darse a conocer ante un público más numeroso.
Y a la hora señalada, el gran espectáculo. Al apagarse las luces vimos en las pantallas un pequeño corto de dibujos en el que se veía principalmente a Angus en un tren a toda velocidad y que acababa con la máquina en escena y la banda atacando Rock'N'Roll train, seguida de Hell ain't a bad place to be. A partir de ahí pues a disfrutar con clásicos: Back in black, Shot down in flames, Dirty deeds done dirt cheap, Hells bells (con Brian Johnson colgándose de la campana), The jack (con el striptease de Angus), You shook me all night long.... Temas de su último disco: Black ice, War machine, la excelente Anything goes... Y la recta final para no parar: TNT, Whole lotta Rosie (con la clásica muñeca gigante) y un Let there be Rock en el que el pequeño guitarrista (curiosamente en el día de su 54 cumpleaños) demostró que el tiempo no pasa para él, y es que esa canción le supone un auténtico tour de force físico. Los bises, como no con Highway to hell y For those about to Rock (we salute you) y sus cañones dejándonos sordos a todos. Fantástico.
Muy bien Brian Johnson con su voz y su saber estar en escena. Discretos y efectivos como siempre Malcolm Young, Cliff Williams y Phil Rudd (al que algunos rumores colocaban fuera de la banda), y Angus Young pues.... es Angus Young, el más grande.
Ahora a esperar dos meses para disfrutar su segunda visita del año, esta vez en el Estadi Olímpic. No nos podemos quejar, dos veces en tan poco tiempo.

Mr. Wolf

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