viernes, 22 de mayo de 2015

LYDIA LOVELESS. ROCKSOUND. 19/05/15

En el momento en que descubres a una cantante con canciones tituladas Steve Earle o Chris Isaak, sabes que forzosamente se trata de alguien interesante, aparte de intuir de manera evidente por donde van los tiros de su música. Y puedo decir claramente que después de haber comprobado su directo, el interés ha ido en aumento. Muchos esperábamos una noche tranquila, agradable y relajada; y nos encontramos con una intensidad y una fuerza sobre el escenario que nos dejó con la boca abierta. Curioso viniendo de una chica tan joven (24 añitos), de aspecto tímido y físicamente muy pequeña. Con cuatro músicos respaldándola, entre ellos el bajista Ben Lamb, que creo que es su marido, y que es otro personaje bastante peculiar. Viendo su imagen es más fácil imaginárselo como el bajista de Testament que el de la banda de una cantautora de Ohio.
El inicio con Head fue el disparo inicial, y el pistón siguió toda la noche al mismo ritmo. Hurts so bad, Wine lips, Learn to say no o Verlaine shot Rimbaud fueron algunos de los temas que sonaron, con una banda más que compacta donde sobresalía un irresistible pedal steel guitar. Y el final, bueno, había que verlo. Lydia dejó en el suelo su guitarra y cantó sobre ella, o casi podríamos decir que tuvo sexo con ella mientras su grupo se desataba en un desenlace de la noche ciertamente muy Punk. Todo ello muy sorprendente e impactante al mismo tiempo, y que, desde luego, dudo que dejara a nadie indiferente.
Un EP y tres discos en el mercado alumbran una carrera que hoy por hoy tiene muy buena pinta. Incluso la enorme Lucinda Williams habla bien de Lydia. Y por la red podéis encontrar vídeos de ella tocando con Patterson Hood, de Drive-By Truckers. Con este tipo de padrinos ya merece la pena echar un vistazo a su música, ¿verdad?

Mr. Wolf


Más info en la web del músico

sábado, 16 de mayo de 2015

LOQUILLO & NU NILES. RAZZMATAZZ. 14/05/15

Nunca he sido el mayor seguidor de la música de Loquillo, pero sí debo reconocer que todo lo que hace me merece el mayor de los respetos. Desde luego, su faceta más rockera es mi preferida, y además, estamos hablando de un tipo que ante todo es un fan. Lo recuerdo asistiendo a un lejano concierto de Iggy Pop en Studio 54. También lo ví en Zaragoza, en la visita de los Who de hace casi una década. Y aún no hace un par de años, no faltó en la gran noche de Kris Kristofferson. Y no es habitual ver a músicos reconocidos asistiendo a conciertos, por lo que mi respeto en este sentido hacia él es total. Otra cosa es su actitud. Ahí ya habrá opiniones para todos los gustos, y cada uno que decida la suya.
Por lo que respecta a esta gira, su alianza con los fantásticos Nu Niles no dejaba lugar a dudas: esperábamos Rock'n'Roll en mayúsculas y eso fue lo que tuvimos.
Los Velvet Candles abrieron la noche, con sus hermosas armonías vocales de los 50, levantando al público con temas propios y versiones como el clásico The wanderer, de Dion, que sonó a gloria. Inmejorable manera de iniciar la velada.
Más tarde, los Nu Niles abrieron fuego con el irresistible instrumental de Hawai 5.0, y ya con un elegante Loquillo en escena atacaron con Eres un rocker. Buena manera de dejar las cosas claras desde el inicio. A partir de ahí la noche fue una fiesta en todo momento, con un público entregado ya de antemano. Hubo tiempo para apariciones especiales de músicos invitados, caso de los propios Velvet Candles, que junto a Dani Nel·lo y un desatado Igor Paskual participaron de la fiesta. Aunque en mi opinión, el gran triunfador, con permiso de Loquillo, fue el guitarrista Mario Cobo. Como siempre, sensacional. No olvidemos que estamos hablando del hombre que sustituyó a Nick Curran en la banda de Kim Lenz. Palabras mayores.
Con temas como Chanel, cocaína y Dom Perignon, El hombre de negro o Luché contra la ley, la noche fue transitando con brillantez, hasta llegar al éxtasis final de Quiero un camión; el coreado hasta la última letra Feo, fuerte y formal y, sobre todo el último en sonar, Esto no es Hawai, en una desenfrenada versión que desató una auténtica locura, con todos los músicos invitados sobre las tablas, sumando hasta trece personas en el escenario de Razzmatazz. Apoteosis total.
Viendo lo llena que estaba la sala, apenas un año después de su última visita, y lo bien que se está vendiendo Código rocker, su nuevo disco, podemos afirmar que la alianza con
Nu Niles ha sido un acierto. Y también, desde luego, que tenemos Loquillo para rato.

Mr. Wolf


Más info en la web del músico

domingo, 10 de mayo de 2015

IMMACULATE FOOLS. APOLO. 07/05/15

Otra visita más (y van...) de una banda renacida de sus cenizas. En este caso, Immaculate Fools, que vivió su etapa de gloria a mediados de los 80, especialmente en España, gracias a discos como Hearts of fortune o Dumb poet. Ahora, retorno con un único representante de aquella etapa, su líder Kevin Weatherill, acompañado de cinco músicos para revivir aquella época. Y bien, el tiempo ha pasado para todos. Kevin tiene ahora una imagen de abuelete despistado y feliz. Porque de hecho se le veía muy feliz con este retorno, como nos dijo en su terrible castellano. Y hay que decir que su música ha envejecido estupendamente, que es lo mejor que se puede decir tres décadas después de haberse grabado.
Un Apolo infestado de propaganda de una marca asiática de automoción (son los tiempos que corren) ofrecía una buena entrada, sin ser un llenazo; básicamente de gente que ya peina canas o directamente no tiene canas que peinar. Gente que (casi) obtuvo lo que quería, ya que el concierto se basó en su trilogía inicial. Las dos obras anteriormente referidas más Another man's world, su tercer trabajo. Y sí, ciertamente Never give less than everything, Got me by the heart, Come on Jayne o Fighting again siguen sonando de maravilla y mantienen intacta su vigencia. Bonitas melodías combinadas con otras canciones electrizantes que nos hicieron vibrar como la primera vez que las escuchamos. Por supuesto, dos de sus clásicos más importantes se llevaron las mejores ovaciones: Wish you were here y, claro, Immaculate fools. La competente banda que arropaba a su líder nos había ganado con creces. Todo iba sobre ruedas, hasta el momento surrealista de la noche. En el segundo bis, con todo el mundo reclamando Tragic comedy y Hearts of fortune (los dos temas clásicos que se habían quedado en el tintero), aparece el grupo y toca...¡¡¡Immaculate fools por segunda vez!!! Inexplicable. Aunque resulte extraño, se puede aceptar que no toquen esos dos temas. Pero que repitan uno que ya ha sonado no hay quien lo entienda.
Buen concierto, Kevin, pero la próxima vez no te descuelgues con inventos raros, hombre. Toca lo que tienes que tocar.

Mr. Wolf 


Más info en el Facebook del grupo