lunes, 31 de octubre de 2022

PELÍCULAS: WE LOVE ROCKSOUND


Emoción. Esa es la palabra que primero me viene a la cabeza después de haber visto este documental dedicado a la inigualable sala Rocksound, estrenado tras una larga espera en el festival In-Edit. ¡Qué felices fuimos acudiendo allí habitualmente durante casi tres lustros!¡Y qué pena que ya no exista ese templo rockero! Antonio, Sandro y todos los responsables de que funcionase aquel pequeño garito del Poblenou tendrán nuestro agradecimiento eterno, y esta película les hace justicia.
 
En We love Rocksound se hace un repaso a la historia de la sala, con imágenes de muchos de los conciertos que hubo en ella, además de multitud de entrevistas a gente relacionada. Así, vemos hablar a músicos (nacionales e internacionales), periodistas, promotores o público en general. También aparece el dueño de discos Revólver, otro personaje que quizá merecería un documental, tal y como están las cosas ahora mismo. Obviamente, Antonio Celeiro es el máximo protagonista, y resulta admirable ver el esfuerzo que le supuso sacar adelante el local, con las pocas horas de descanso que tenía diariamente. Gran parte de la película está dedicada a la figura del desaparecido y llorado Javier Ezquerro, pieza fundamental para que la historia llegara hasta donde llegó, y al que lógicamente le estaremos siempre agradecidos, por supuesto.

En el documental también hay espacio para hablar de la poca repercusión en medios y el nulo interés de las instituciones por Rocksound y la cultura musical en general. Hoy la sala ya no existe, y Barcelona es un poco más triste de lo que ya era con su existencia, yendo de cabeza a ser una ciudad únicamente con conciertos masivos y festivales. No desvelaremos nada, pero en los minutos finales hay un comentario buenísimo respecto a este tema que yo personalmente me lo apunto, porque aparte de las risas que provoca es una verdad como un templo. Y los que ya habéis visto la peli seguramente estaréis de acuerdo conmigo.

We love Rocksound, un documento emocionante para los que vivimos a tope ese local, el mejor que había en la ciudad en unos años irrepetibles para la gente que amamos el Rock'n'Roll. Y quizá somos más de lo que parece, viendo que los dos pases en el festival agotaron entradas. We love Rocksound, siempre.

Mr. Wolf
 

 

 
 

1 comentario:

Rafa Albarran dijo...

Gracias por vuestra crítica. Encantados de que os haya gustado y de que os haya devuelto, durante un ratito, a aquella mítica ya Rocksound.