El concierto que nos ofrecieron los hermanos Dickinson fue algo parecido a una ceremonia chamánica. Con ese sonido de Blues pantanoso, consiguieron apoderarse de nuestros sentidos y hacer que nos abandonáramos a sus ritmos y canciones. Dos horas de un concierto sensacional, con el que hicieron muy felices a los aficionados al Blues y a los desarrollos instrumentales. La batería de Cody Dickinson sonó de lujo. Es el sustento perfecto para la exuberante exhibición de su hermano Luther a la guitarra. Domina el instrumento como nadie, las notas parecen fluir con una naturalidad sorprendente de sus manos y todo lo ejecuta con una sonrisa en la cara. Como si le resultara de lo más sencillo. Supongo que si creces en un estudio de grabación, rodeado de instrumentos y músicos extraordinarios, y con un padre como Jim Dickinson, todo lo relacionado con la música resulta fácil.
Tocaron varios temas de su último disco, Set sail, versiones de clásicos de blues como Shimmy she wobble de Otha Turner, Back back train de Mississippi Fred McDowell o Poor black Mattie de R. L. Burnside. Desarrollaron los temas estirándolos y transformándolos como les vino en gana. Hicieron guiños a los Grateful Dead, o al mismísimo Bob Marley. Pero el repertorio casi que les daba igual , consiguieron hacernos entrar en sus mágicos e hipnóticos sonidos, y transportarnos por la historia del Blues. Cody cantó los temas más rockeros, y Luther los más tranquilos. Se intercambiaron los instrumentos en un tema resultón y divertido, que evidenció que es algo que sólo deben hacer como broma puntual. La soltura y contundencia de Cody a la batería y la magia que consigue Luther a la guitarra son únicas.
Un broche de oro para la edición de 2023 del Blues & Ritmes de Badalona.
Mr. Sheep
Más info en la web del grupo
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