El pasado Sábado fue una
fecha grande, de las que recordaremos durante mucho tiempo. El deseo de poder
ver en Barcelona a la que es en estos momentos la mejor banda de sonido
americano del país, por fin se cumplió, y se disfrutaron esas enormes canciones
en una sala Rocksound con sonido perfecto, calor y gran comunión del grupo
con el público.
Para los que ya habíamos
disfrutado de su directo no fue ninguna sorpresa ver el grado de compenetración
que han conseguido, para los que sólo conocían los discos y para los curiosos
que se acercaron a la sala fue toda una revelación verles en acción.
La coincidencia con la
final de copa que se disputó ése día produjo una cierta confusión con los
horarios y hubo bastante gente que accedió a la sala con el show en marcha. No
estaría de más una adecuada información para evitar estas cosas en el futuro.
Lo primero está claro, Rock.
El concierto fue
alternando los temas de sus dos discos, Strong enough to refuse y Welcome to
desert town con grandes versiones. Así convivieron en el escenario sus joyas como Calling, Find the door,
Anymore, Can’t you see?, When she came to the city, Down the river o Desert
town con sus revisions del maestro Dylan, Love sick y Most likely you go
your way and I’ll go mine. También se
acordaron del sonido Crosby, Stills, Nash and Young. Tocaron Love the one
you’re with de Stephen Stills y el Southern man de Neil Young, donde Fernando
Rubio brilló con luz propia.
La banda conjuga su
calidad musical con unas grandes armonías vocales en las que pasan de las
voces de Nacho Para a las de Paco Del Cerro, Fernando Rubio del que tocaron su
tema Please don’t spoil my day para cerrar la noche, y también Paloma Del Cerro
para ofrecer un contrapunto luminoso. Sin duda esta versatilidad juega a su favor
ampliando el abanico de recursos de la banda. Chencho Vilar al bajo, Iván
Estefanía a la guitarra y Carlos Campoy a los teclados cumplieron perfectamente
su labor de escuderos de lujo en una banda mayúscula.
Vivimos en unos tiempos
confusos en el panorama musical del país, en muchas ocasiones grupos que son
meras anécdotas copan hasta la saciedad los grandes festivales y se repiten más
que el ajo en todos los eventos. Por eso no comprendo como una banda como
Bantastic Fand no aparece no ya en los grandes festivales generalistas, sino en
los supuestamente dedicados a las músicas de raíces e incluso en los grandes
festivales de Blues. Se merecen mucho más simplemente por la calidad de su
propuesta y sus canciones, pero es que además ellos representan mejor que nadie
en nuestro país hoy en día el espíritu independiente de la música. Componen,
graban, mezclan, organizan sus bolos, se relacionan personalmente con los fans
o con los medios, venden directamente su producto; en fin, el auténtico do it
yourself, el de verdad, y el de calidad.
Un abrazo a Nacho Para y al resto de la banda, gracias por vuestro buen rollo.
Esperando que vuelvan pronto a Barcelona.
Esperando que vuelvan pronto a Barcelona.
No hay comentarios:
Publicar un comentario